Una pintura epoxica es una pintura de altas prestaciones compuesta principalmente por resina epoxi.
La pintura epoxi se usa hace ya muchos años en sitios donde se requiere resistencia, durabilidad y alta protección. Es un producto tradicional en la industria, donde se cubren suelos y paredes. Es también utilizado en el recubrimiento de embarcaciones y hasta sitios tan extremos como las refinerías de petróleo y las plantas químicas.
Últimamente se ha popularizado su uso en el ámbito residencial, donde es posible utilizar pinturas epoxi para pintar paredes, sobre azulejos.
Una de las maneras más comunes de aplicar la pintura epóxi es con brochas y rodillos dependiendo del tamaño de la superficie. Estas son las herramientas más adecuadas para pintar suelos y paredes tanto en interiores como en exteriores. La consistencia y la adherencia de esta pintura permite una buena aplicación y una buena cobertura con pocas manos. Solo es necesario un poco de experiencia en el uso de pinturas, ya que el trabajo puede convertirse en algo más complicado que una simple pintura al agua.
Es posible pintar con epoxi con soplete o pistola neumática, pero para tal caso hay que tener varios factores en cuenta como la viscosidad, la temperatura del material y la presión del aire, o la utilización de pulverizadores airless. Por todo esto se recomienda este modo de aplicación de pintura para profesionales del oficio.